Un Sol de Ciudad

La televisi贸n y los contenidos infantiles

La televisi贸n y los contenidos infantiles

Publicado el: 16-03-2011

El artículo 20.4 de la Constitución Española reconoce el derecho de protección a la juventud y la infancia. Dentro de esa protección se incluyen los medios de comunicación, especialmente la televisión, un medio al que los niños dedican buena parte de su tiempo y que no siempre se adapta a sus necesidades.

 

El 31 de marzo de 2010 se aprobó la nueva Ley General de la Comunicación Audiovisual, que prohíbe la emisión en horario protegido (entre las 06:00 y las 22 h.) de contenidos audiovisuales que puedan perjudicar el desarrollo físico, mental o moral de los menores. Sin embargo, aún seguimos viendo cómo las cadenas incumplen a veces este código, emitiendo programas y publicidad con un contenido poco adecuado para los menores.

 

Así, para fomentar el cumplimiento de la ley y del Código de Autorregulación sobre Contenidos Televisivos e Infancia, los propios telespectadores pueden formular sus denuncias a través del formulario que se encuentra en la página web www.tvinfancia.es o enviando un correo a reclamaciones@tvinfancia.es incluyendo los siguientes datos sobre el programa sobre el que se tiene la queja: cadena de la emisión, programa, fecha y hora de emisión y objeto de la emisión (sexo, temática conflictiva, violencia, comportamiento social). A este respecto, entre marzo de 2009 y marzo de 2010 se presentaron 128 quejas, aunque finalmente sólo 22 fueron aceptadas.

 

Además del horario de protección infantil, que va desde las seis de la mañana hasta las diez de la noche, se añaden unas franjas de protección reforzada que van de 8 a 9 h. y de 17 a 20 h. de lunes a viernes y de 9 a 12 h. los sábados, domingos y festivos nacionales.

 

No hay que olvidar que los niños son como esponjas, por lo que hay que prestar especial atención a lo que ven y aprenden de la televisión, para evitar que asimilen pautas de conducta inadecuadas, como discriminación, obsesión por el culto al cuerpo o lenguaje soez. Y es que los niños a determinadas edades aún no diferencian entre lo que es real y lo que no, ni tienen definidos los conceptos de lo que está bien y lo que está mal.

 

Tampoco hay que dejarse engañar por los dibujos animados. El que se presenten como tal no quiere decir ni mucho menos que sean adecuados para los menores, ya que en algunos casos se trata de dibujos con contenido y lenguaje violentos.

 

Por último, es necesaria una mención a los videojuegos, que cada vez ocupan más tiempo en la vida de los pequeños. Es importante comprar videojuegos que estén adaptados a su edad, evitando especialmente aquellos que inciten a la violencia, como los de peleas.

 

Rocío Bonachera Escribano
 

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